La dermis del rostro, junto con las manos, son las más expuestas a los factores ambientales y la cara es la que más lo sufre. Por eso debemos tener una higiene adecuada. Además de nuestra rutina diaria, de vez en cuando (una vez al mes), deberíamos hacernos una limpieza facial en un centro especializado.
Si te notas la piel apagada, sin luz acude a tu salón de belleza de confianza y pide que te hagan una limpieza, los resultados son al momento. Pero si tienes una fiesta o un evento al que quieres acudir deberías pedir cita, al menos, un día antes de la reunión en cuestión. Para evitar aparecer con rojeces y para facilitar que la piel transpire después del tratamiento.
¿Conoces alguno de los beneficios de la limpieza facial profunda?
•Permite la oxigenación de la piel.
•Retrasa la aparición de arrugas.
•Ayuda a disminuir la apariencia de cansancio.
•Elimina acné y puntos negros.
•La piel luce más suave y tersa.
•Una piel limpia hace lucir mejor el maquillaje.
Cuidar tu rostro es más fácil de lo que piensas, sólo tienes que adoptar ciertos hábitos como lavarse la cara a diario. La disciplina es la clave del éxito.
Mujer21
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