Hemos hablado en otras ocasiones de lo que los hombres esperan de nosotras o qué odiamos nosotras de ellos, hoy os mostramos algunas de sus cualidades que hacen que nos derritamos.
Físico
No nos gusta la perfección, nos gustan sus defectos: una nariz grande, una cicatriz, un lunar, algo que los haga diferentes… Pero sobre todo lo que nos gusta es lo que transmiten con una mirada, una voz cálida y grave, una mandíbula marcada. En cuanto al cuerpo, a todas nos resulta atractivo un hombre cuidado y musculoso, pero preferimos para compartir nuestra vida alguien normalito que no esté tan pendiente de su físico y que le preocupe más nuestro bienestar.
Sinceridad
Los hombres que van con la verdad por delante, honestos, leales. No queremos a los mentirosos que solos nos dicen lo que queremos escuchar. No intentes encandilarme con tus palabras dulces, que igual que a mí, le dices a todas. Además las mujeres tenemos ese sexto sentido que nos hace sospechar cuando las cosas no son claras y como descubramos tu mentira… ándate con cuidado.
Sentido del humor
No hay mejor terapia que una sesión de risas y si el hombre con el que estás es capaz de hacerte reír tiene la mitad del camino ganado. No nos gustan los payasos, pero si los hombres divertidos que saben donde y cuando pueden hacer bromas.
Responsabilidad
No queremos un niño, queremos un hombre con las ideas claras y unas metas marcadas. Alguien con quien avanzar en el camino, no un chico del que tengas que tirar constantemente para conseguir algo.
Impredecible
Sabemos que nos gustan las sorpresas, los planes improvisados, los regalos no impuestos como en cumpleaños o aniversarios. Que nos alegren la mañana con un detalle que no esperábamos o un desayuno en la cama. Esas pequeñas acciones son las que nos hacen felices y nos enamoran.
Mas cabeza que cuerpo
Si decíamos que el cuerpo era importante, el cerebro lo es más, un gran conversador que sepa escuchar, inteligente, nos gusta estar con alguien que tenga cosas nuevas que mostrarnos y aprender juntos las maravillas de la vida.
No entiendo por qué dicen que somos exigentes, en resumen, solo queremos alguien sensible, amable, atractivo, con buena planta, gran conversador, divertido, entrañable y que haga de cada instante una nueva aventura su lado. Algo sencillo, no comprendo por qué aún sigo soltera.
Mujer21
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