Todas las mujeres no somos iguales ni tenemos las mismas curvas. A veces nos puede gustar mucho cómo le queda una falda a una modelo, pero en nuestro cuerpo no queda tan bien. La clave para sacarnos el máximo partido está en escoger una falda que sepa equilibrar nuestras curvas. Te ayudamos a elegir qué tipos de faldas encajan más con cada cuerpo.
Si tienes un cuerpo con forma de reloj de arena eres toda una afortunada. Este tipo de silueta se caracteriza por tener una cintura estrecha, además de los hombros a la misma altura que las caderas. Prácticamente te puedes poner todo tipo de faldas, pero la que más saca partido a tu silueta son las de tubo, perfectas para remarcar tu figura.
Muy similar a esta figura, encontramos la silueta de cuerpo rectangular. Al igual que la de reloj de arena, los hombros están a la misma altura que la cadera pero no cuentan con una cintura estrecha. De esta manera, hay que apostar por faldas con vuelo, marcadas en la cintura, combinadas con camisas anchas.
Las mujeres con caderas anchas y hombros más estrechos, denominada silueta con forma de triángulo o pera, deben optar por faldas con caída y poco estampado con el fin de no acentuar más esta parte de su cuerpo y equilibrarlo con la parte superior.
En cambio, si tienes un cuerpo con forma de triángulo invertido, hombros más anchos que tus caderas, debes optar por faldas de vuelo, con estampado o textura. De esta manera, acentúas esta parte de tu cuerpo dándole vida a tu figura.
Además de tener en cuenta tus curvas, no debes olvidarte de tu estatura. Si eres bajita deberías llevar faldas de cintura alta y el corte no debería ser por las rodillas. En cambio, si eres alta puedes optar por largas o cortas y la forma dependerá exclusivamente del tipo de figura que tengas.
Mujer21
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